Surne Bilbao Basket recibe en casa este sábado al Dreamland Gran Canaria en la jornada 28 de Liga Endesa. El partido comenzará a las 17:00 en el Bilbao Arena. El Gran Canaria es sexto en la tabla con un récord de 17 victorias y 10 derrotas. Será un partido difícil, pero el Bilbao Basket llega en buena forma con 3 victorias ligueras consecutivas y de ganar en el partido europeo en Chemnitz. El Granca viene de ganar en casa al Valencia Basket. Sin embargo, llevan un récord de 3-3 en las últimas 6 jornadas.
Será un duelo importante para ambos equipos. El Bilbao Basket busca afianzarse en puestos europeos y sellar definitivamente la permanencia. El Gran Canaria, por su parte, pelea por la cuarta, incluso la tercera, posición de la tabla buscando un buen puesto de cara a los play-off. Los de Ponsarnau deberán vigilar a Ethan Happ y Nico Brussino, máximos anotadores de los canarios con 12 puntos de media por partido ambos. Desde el perímetro habrá que estar encima de John Shurna que tiene un 45% de acierto en triples.
Los de Lakovic han tenido toda la semana para preparar este partido, mientras que el Bilbao Basket viene de jugar en Alemania este miércoles, y eso puede jugar en contra. Aun así, el calor de la afición de Miribilla empujará a los MIB gracias al gran ambiente que se respira en Bilbao esta semana.
Jaume Ponsarnau hablaba esta mañana sobre el Gran Canaria, y reconocía que es un equipo difícil contra el que jugar. “El Gran Canaria es un muy buen equipo, que a nivel de valores es de los equipos más sólidos de la liga, de lo que proponen en ataque y en defensa con muy buena estructura táctica y con compromiso. Tienen una particularidad y es que tienen que viajar mucho en sus partidos. Esta semana tendrán que viajar también, pero han tenido una buena semana para preparar este partido. A partir del reconocimiento de sus virtudes, que son muchas, vamos a intentar imponer las nuestras. Va a ser un partido muy duro, porque es de los equipos más duros de la liga”, declaraba el coach.
Quedan 7 partidos por delante. Sobre cómo afrontara el equipo la recta final de temporada Ponsarnau explicaba: “El termómetro de cómo vamos a ser a partir de ahora probablemente no está en este partido. Está en el siguiente, que habrá una semana entera y veremos cómo van las ambiciones, los compromisos… Pero pintamos muy bien. Mis sensaciones, en este sentido, son muy buenas. Me gustan los pasos que han hecho muchos de los jugadores hacia adelante. Jugadores que estaban en una temporada muy importante para ellos, para ver si eran de esta liga o no. Tenían el reto no sólo de demostrar que eran de esta liga, si no de hacerlo lo bien que lo están haciendo. Vamos a ver cómo respondemos, a ver la autoexigencia de cada uno a partir de este momento”.
“En mi experiencia después de buenas temporadas hay un momento que se pierden los objetivos”, contibuaba Ponsarnau. “Es que, al final, esto es un mercado, y empiezan a aparecer pretensiones y expectativas. Pero por eso mi objetivo es tener un objetivo, y el objetivo es querer ganar los 7 partidos que nos quedan”, sentenciaba el entrenador de los hombres de negro.